Nada personal, pero estando en el séptimo día de este susto, me encuentro en remolinos de imágenes retro con texturas y signos de la ciudad de la furia que parece estar en el borde como cuando quedan los ecos de tu voz cantando: nena, nunca voy a ser un súper hombre. Hoy es un día común de emociones simples porque todo queremos una doble vida para vos. Sabemos que estás en camino a recuperarte y nuestra fe nos dice que estarás mejor. Todos sabemos que no será un adiós, gracias totales... más bien esto es un ¡me verás volver!
1 comentario:
que hermosa entradaaaaaaaa, lo extraño...
Publicar un comentario